Entre la diana del poema y su desecación
por una brecha abierta
en el flanco arañado de la montaña
ella lanza, la almendra del fuego,
la noche joven ayuna
tras la noche desmantelada
ella, como es debido, se da
y arde
con frías precauciones
el huracán engendra descendencia
un relámpago une
la noche con la noche
Traducción de Víctor Bermúdez.
Original aquí.